Y un día más me abrazo a la palabra de MARIO BENEDETTI...; me contagia esperanza, me despierta "te quieros", es como una "bienaventuranza", enciende mi alegría, me aferra a la PAZ, que como él dice: "nos hace ser mejores".
«Cuando la guerra se disfraza de paz, es la peor de las paces. Invade como ayuda, pero deja cenizas por donde pasa y muertes por doquier. La paz se vuelve hipócrita, los mansos no le sirven. Agrede a los otoños y les pisa las hojas. Y por si fuera poco, su razón de ser tiende a la sinrazón [...]. Cuando la guerra se disfraza de paz, nos deja casi atónitos, inaugura temblores, se afirma en la tristeza.
La paz nueva, la otra, la que es nuestro signo verdadero, conoce quiénes somos y nos hace mejores. Y algo que no es secreto: la paz nunca se disfraza de guerra y sólo a ella el corazón acepta y la recibe con latidos, que son como un abrazo. Ya quedó constancia en el refranero: “La paz es la madre del pan”.
LA PAZ NOS HACE MEJORES.
RECIBIMOS LA PAZ CON ABRAZOS Y LATIDOS.
LA PAZ ES LA MADRE DEL PAN.
¡¡¡¡BENDITA SEA LA PAZ!!!!
Si no queremos guerras entonces hay que salir de castro y de chavez que son los que fomentan las guerras en todas partes del mundo.
ResponderEliminarAnónimo, y por tanto, desconocido... Tu planteamiento es demasiado simplista y no puedo aceptarlo, ni dejarlo pasar, sin hacer un comentario... Quienes fomentan realmente las guerras son los que están verdaderamente enmarañados en el poder, en la fabricación de armas y la acumulación de riquezas.
ResponderEliminarAsí es como yo pienso... Por supuesto respeto tus criterios, pero no los comparto.