El 2 de abril de 1978, se celebró en la Catedral de Córdoba –La Mequita– un Congreso sobre la Cultura Andaluza que fue inaugurado por Antonio Gala con una conferencia a la que pertenece el siguiente fragmento:
«Es preciso que Andalucía recuerde tantas luchas vividas por seguir siendo ella y vuelva en sí de su desprecio histórico que la hizo siempre ser malentendida... La reina descalza, la hermosa reina todavía harapienta, se incorpora de su duermevela, levanta con sus manos encallecidas el espejo mágico casi olvidado ya, reconoce las iluminadas facciones, empuña la bandera de su dominio, una bandera en la que no se sabe si a la esperanza la representa el verde, como suele, o el blanco, que es lo que está por hacer todavía. La reina se levanta ágilmente y rompe a cantar con la voz hecha júbilo».
Romper a cantar "con la voz hecha júbilo" que protagonizaron, en aquellos años, cantores populares como CARLOS CANO. Carlos, a raiz de las anteriores palabras de Antonio Gala compuso un tanguillo dedicado a aquella Andalucía de los años setenta, que empezaba a "incorporarse de su duermevela"; canción de amor a la Patria Andaluza que decía así:
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"De la luna y del sol" (1980). Disco de Carlos Cano
en el que incorporó la canción "A una bella durmiente". |
«¿A dónde vas si tu nombre es pobreza
y no hay lugar para ti en esta vida,
si nadie sabe que fuiste la reina
de un paraíso de nardos y espiga?
Y hablan de ti como de una mendiga
descalza, triste, sola y harapienta,
que va vendiéndose en noches de juerga
la fantasía, el alma y la canción.
Ay los geranios
y el azúcar moreno
que hay en los labios
de lo que yo más quiero:
caballo loco que va corriendo,
agüita del río,
gaviota que vuela al viento
como un navío.
Quien ve de cerca tu cara
como una llama
queda prendío. ...
...Ya vendrá el viento, traerá la vida
y la memoria vencerá al silencio.
Que tú mi reina sólo estás dormida
en la esperanza de un beso de amor».
Otro de los grandes cantores populares andaluces que luchó con su canto, por una Andalucía libre y reconocida por sus grandes valores, y no por el desprecio que suponían –y siguen suponiendo– los tópicos que se le adjudican, fue ANTONIO MATA.
De Antonio, en el año 2004, recuperé 18 canciones que aparecieron grabadas en un CD adjunto al libro "Manifiesto Canción del Sur. De la memoria contra el olvido". Una de aquellas canciones se llama "Andalucía" y su texto era el siguiente:
«Cada noche te hacen el amor tus campos;
cada noche el Guadalquivir tranquilo
se va llevando tu nombre
para escribirlo en su nido.
Andalucía.
Amaneces abrazada
a un cante por peteneras,
con sudor lavas tu rostro,
después lo secas con tierra
y desayunas cuatro penas
que te ofrece un campesino
cocinadas en trigales
con el fuego del olvido.
Hay sangre vieja en tus venas
de tus años sin destino [...].
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Antonio Mata. |
En tu vientre hay mil silencios
que son gritos no nacidos
ahogados en panderetas
con guitarras y con vino;
y vas cubriendo tu frío
con un traje de lunares
y helada le das calor
a los novios que te salen.
Un andaluz sonriendo
va llorando soleares».