Aunque ya han pasado varios días, no quiero dejar de incorporar al blog, en primer lugar, algunas imágenes realizadas por Juan Miguel Morales el pasado día 17, con motivo del "cuarto cumpleaños" del Blog que celebramos en la Sala Galileo Galilei de Madrid. Celebración en la que, como no podría ser de otra forma, la música y las canciones fueron sus principales protagonistas.
ENRIQUE MARTÍNEZ –amigo de Radio Nacional de España– abriendo la fiesta y acompañándome en un día que fue para mí un precioso regalo. |
¡Gracias, gracias, gracias!... ... Y presenté a DANI FERNÁN, "conductor" de la fiesta. |
DANI FERNÁN leyó un precioso texto; una "loa" a la "canción de autor" y a la "locura" que reproduciré al final del reportaje fotográfico. |
En mitad del concierto, entre presentación y presentación de los cantores que participaron, DANI FERNÁN nos ofreció su "Mamá no se equivoca". |
Abrió el concierto JORGITO KAMANKOLA trovador cubano que estará por España hasta diciembre presentando su disco "Antes que lo prohiban". |
¡Impresionante GEMA HERNÁNDEZ! Ella sí que sabe CANTAR COMO QUIEN RESPIRA y ¡madre mía, cómo canta! |
MARTA SOLIS, acompañada de MON CABRERA inundaron el Galileo de belleza, de sensibilidad y de aires canarios. |
MARTA SOLIS y GEMA HERNÁNDEZ nos regalaron un inesperado abrazo musical cantando "El sitio de mi recreo", de Antonio Vega. |
Momento tarta con PALOMA LÓPEZ y todos los participantes en el concierto. Pues sí, hemos cumplido CUATRO AÑOS y a los pocos días ya superamos el 1.001.100 número de visitas. ¡GRACIAS! |
Tras esta secuencia de imágenes voy a copiar las palabras que el cantautor DANI FERNÁN leyó como pórtico del cumpleaños... ¡Fueron muy hermosas! ¡Un precioso regalo!...
«Soy Dani Fernán, soy cantautor. Soy bohemio, soñador, vivo dejándome el pelo largo y las ideas largas, vivo vistiendo “el traje gris de la multitud”, “en la soledad, con tanta gente que me da miedo”, “gastando el tiempo, haciéndome el cantante…”. Esto, lo que soy…
Vivo en el mundo de todos, y vivo en el mío propio, como todos. Peor, eso sí. Pero mejor, eso también.
Y el sistema, que no nos banca, y los bancos que nos desbancan. Y cobrando en negro. Y viviendo de colores. Y la Sgae. Y el Ayuntamiento. Y el Presidente. Y el Sistema Monetario Internacional.
Y sí, también, tragamos por aquí, sacamos pelas por allí donde no suena guitarra alguna, hacemos lo nuestro, que es eso también. Y “aunque afuera siempre hacen demasiado fútbol”, seguimos en la brecha, en la herida, cantando y contando historias cada uno a su manera, viviendo y haciendo cada uno su propia historia.
“Ya ven, a veces me canso de ser hombre”.
Los cantautores, pura poesía, puro encanto, todo música, todo creación. Pero también otra forma de emprendimiento empresarial, una inversión, un riesgo, la vida que se va.
Hay que estar loco…
Y aunque rezara León Felipe que «Ya no hay locos, amigos, ya no hay locos...; todo el mundo está cuerdo, terrible, monstruosamente cuerdo», no puedo evitar colocar aquí este poema de mi amigo Suso Sudón que dice:
“Sólo los locos
pueden asegurar con certeza
estar cuerdos.
Sólo los locos.
Sólo los locos apartan del camino
las piedras en las que tropiezan.
Sólo los locos
saben lo imperfecta que es la perfección,
sólo ellos
saben poner en duda el sentido común,
desordenar el tiempo,
perder la partida para poder ganar.
Sólo los locos.
Sólo los locos colocan
deliberadamente las piedras otra vez en el camino
por el puro placer de tropezar de nuevo.
Sólo los locos vuelven a empezar
con la pasión de los niños
aquellas empresas que dejaron a medias.
Sólo los locos
toman las riendas de sus instintos animales
para cabalgar hasta estrellarse con el horizonte.
Sólo los cuerdos tienen miedo.
Sólo los locos se vuelven locos por lamerle las heridas a otros locos.
Sólo los cuerdos están muertos.
Sólo los locos viven adrede
y arriesgan la vida
para no volverse cuerdos.
Sólo los cuerdos
están locos.”
Y esta Biblioteca de la Canción de Autor, este Diccionario de Autores e Intérpretes, así como cualquier canción, así como cualquier cuento, es producto de la locura del amor, la única locura auténtica, la del amor, en este caso, la del amor de Fernando hacia la canción.
Doy por hecho que me dirijo a otros amantes locos de esta atracción fatal, que nos da, pero nos quita, que nos mata y nos renace.
Y mientras los micrófonos de los medios no nos ponen en el aire a volar nuestras canciones, hacemos conciertos. Y viene gente. Mucha, poca. Da igual. Porque entre esa gente hay mayoría innegable de enamorados de esta musa fatal, que es la canción. Y si la canción es el objeto de deseo, cada uno tiene sus armas… sus cámaras, su afán de hacer llegar a otro punto lo que vive uno, lo que conoce uno… o el afán de escribir sobre lo escrito, de promover, analizar y hacer entender lo que por dentro la canción significa… de darle vida, de ensanchar el camino…
Y aquí un ejemplo claro, una vida dedicada a un amor, una vida en la lucha por poner cimientos a un edificio tan grande construido en nuestra historia. Yo por mi parte, desde los confines de esta juventud que ahora me toca, estoy profundamente agradecido a Fernando González Lucini por sus hazañas, y además, por querer compartirlas conmigo. Y además, lo mejor de todo, es que el tiempo dirá lo que todo esto es y será.
Muchas gracias.»
No hay comentarios:
Publicar un comentario