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lunes, 26 de julio de 2021

ALGUNAS CLAVES PARA UNA EDUCACIÓN EN LA TERNURA

Dedicar y enviar mi "REIVINDICACIÓN DE LA TERNURA" a los amigos y amigas que se han interesado en tenerlo es un momento que para mi es verdaderamente placentero. Me da mucha alegría poder compartir mi trabajo y, en concreto, éste de forma muy especial.

Espero que pueda seguir haciéndolo. Quien desee comprarlo puede escribirme por aquí o a mi correo: fglucini@gmail.com y ¡marchando! va rápido pa'donde sea.


El quinto capítulo del libro lo he titulado "CLAVES PARA UNA EDUCACIÓN EN LA TERNURA". Seguidamente comparto un fragmento de ese capítulo:

«Introduciéndonos, de forma más directa, en el terreno pedagógico o didáctico, vamos a centrar la atención, seguidamente, sobre algunas de las claves en torno a las que debe desarrollarse, en el ámbito escolar, la educación en la ternura.
La primera de esas claves hace referencia a la relación educativa, es decir, al entramado de relaciones que se establecen normalmente en la escuela, y, en particular, a las que mantiene el profesor o la profesora con sus alumnos y alumnas.
En este sentido, de entrada, se impone un principio general que es básico e incuestionable, el rechazo radical y absoluto a la violencia en todas sus posibles manifestaciones. A la violencia física y psicológica –cuando directa o indirectamente, se lesiona la integridad de la vida humana, generando sufrimiento y dolor–, y a la violencia represiva –producida cuando a los alumnos y a las alumnas se les priva de sus libertades fundamentales, o se atenta contra su dignidad.
La pedagogía de la ternura es una pedagogía que se fundamenta en la creación de unas relaciones interpersonales cálidas y afectivas; es un pedagogía de acogida que rompe las barreras de la desconfianza y del desamor, que acaricia, que respeta, que integra, que opta por el diálogo, que siempre se siente enriquecida del encuentro en la diversidad, y que, a fin de cuentas, educa e instruye con cariño y con sensibilidad.
Este rechazo a la violencia –o si se quiere, más concretamente, al uso de la fuerza, o de la «mano dura» en las relaciones educativas–, y de exaltación, por el contrario, de la ternura, hay quienes lo critican alegando que conduce, de forma irreversible, a la debilidad y, finalmente, a la crisis o la falta de disciplina y de autoridad en el ámbito escolar.
Crítica fácilmente rebatible desde dos puntos de vista:
En primer lugar, respecto al riesgo de la llamada debilidad, todo va a depender de loa forma en que se entienda el concepto de ternura. si por ternura se entiende blandura, permisibilidad y falta de exigencia, puede que esa debilidad se produzca; pero ese no es nuestro caso.
Ya hemos afirmado anteriormente que, desde nuestro punto de vista, ser tierno, y defender el valor de la ternura, implica ponernos en el lugar de los otros, interesarnos y conectar profundamente con sus realidades, sentirnos solidariamente unidos a ellos, y manifestarnos claramente contestatarios, intransigentes y rebeldes frente a todo aquello que atente, a nuestro alrededor, contra la paz, la justicia, la igualdad y la libertad; valores sin los que resulta inviable las dignidad humana. planteamiento que, por supuesto, nada tiene que ver con lo que podríamos calificar como una pedagogía de la domesticación, del conformismo, o del sometimiento irreflexivo.

En segundo lugar, respecto al riesgo de la crisis de la autoridad, como consecuencia del ejercicio de la ternura, el error –intencionado o no– es aún más evidente; Luis Carlos Restrepo lo pone de manifiesto con gran claridad:
Cuando ejercemos algún tipo de autoridad sobre los hijos, los alumnos, los ciudadanos –escribe Restrepo en su libro el derecho a la ternura–, nos endurecemos por que nos da temor reflejar nuestras emociones, creyendo que si lo hacemos perdemos el respeto que nos deben quienes están bajo nuestro mando. sospecha válida si queremos educar siervos, para lo cual es preciso establecer un respeto autoritario. Pero si queremos educar para la libertad nada mejor que combinar el ejercicio de la autoridad con una gran disposición afectiva, apertura emocional que nada tiene que ver con la inconsistencia de las normas. [...]. es pertinente recordar que lo que nos queda después de muchos años de formación en la escuela o la universidad, de convivencias en la calle o la familia, no son tanto cadenas de argumentos o bloques de información, sino el recuerdo del clima afectivo e interpersonal que pudimos respirar. lo que permanece grabado en el recuerdo es el manejo autoritario o acariciador que las personas e instituciones del entorno pusieron en práctica con nosotros. lo que nunca olvidamos de los demás es su actitud y su disposición corporal, el clima interhumano que crearon a nuestro alrededor. las grandes decisiones de nuestra vida se alimentan de la calidez o amargura que logramos percibir en los climas afectivos que nos rodean desde la infancia.

En efecto, el ejercicio de la autoridad no está reñido, ni entra en conflicto, con la práctica de la pedagogía de la ternura.

Educar en la ternura no significa «dejar de exigir», ni promover, como consecuencia de esa falta de exigencia, el desorden y la indisciplina, sino todo lo contrario.

Educar en la ternura significa crear, desarrollar y salvaguardar, en el centro escolar y en el aula, un clima cálido y afectivo regido por principios tan básicos como la escucha, el respeto, la comprensión, la ayuda, la no agresión, y, en general, todos los valores que favorecen una convivencia pacífica y democrática; tarea que irremediablemente implica la necesidad de promover unas normas de convivencia que aseguren y garanticen el mantenimiento de ese clima afectivo. normas que deberían ser elaboradas, interioridades, asumidas y com- partidas por todos los alumnos y las alumnas, y que necesariamente debemos exigir que se cumplan porque de su cumplimiento va a depender que la ternura se convierta, o no, en el valor central de las relaciones educativas. 



jueves, 22 de julio de 2021

miércoles, 21 de julio de 2021

QUINO, MAFALDA Y UNA GENIAL EVOCACIÓN DE RAFAEL ALBERTI

Ayer, trabajando sobre el futuro libro de Alberti, me encontré con algo que me apetece mucho compartir. Os cuento: El poema de Rafael "Se equivocó la paloma" es, sin duda uno de sus más populares: de él se han hecho más de 200 versiones cantadas; y curiosamente incluso el humorista gráfico Quino (argentino) evocando aquel poema creó y publicó la siguiente y genial tira cómica.

(De paso os recuerdo que si queréis comprar el libro "REIVINDICACIÓN DE LA TERNURA" -¡me daríais una alegría!– podéis hacerlo escribiendo a mi correo: fglucini@gmail.com).

martes, 20 de julio de 2021

DISTRIBUCIÓN Y VENTA DEL LIBRO «REIVINDICACIÓN DE LA TERNURA».

Ya publicado el libro "REIVINDICACIÓN DE LA TERNURA" en una edición de 150 ejemplares numerados, en primer lugar, a partir de hoy, lo enviaremos a los 20 mecenas que lo adquirieron en la campaña de verkami.

El resto de los ejemplares, también a partir de hoy, están en VENTA al precio de 15 € incluidos los gastos de envío.

Como la venta será exclusivamente de forma personal y directa, quienes estén interesados en COMPRARLO pueden dirigirse solicitándolo a mi correo personal: 

fglucini@gmail.com 

sábado, 17 de julio de 2021

«REIVINDICACIÓN DE LA TERNURA». UN NUEVO LIBRO CREO QUE ESENCIAL EN LOS TIEMPOS QUE CORREN.

Acaba de llegarme mi nuevo libro "REIVINDICACIÓN DE LA TERNURA" ya editado. Es un libro que tenía muchas ganas de publicar porque creo que se trata de una propuesta necesaria en los tiempos que corren. Como dijo Tomás Borge, poeta nicaragüense y miembro fundador del Frente Sandinista de Liberación Nacional: «No se puede ser revolucionario sin lágrimas en los ojos y sin ternura en las manos».

Comparto seguidamente un fragmento del tercer capítulo del libro:

«En política la ternura, la sensibilidad e incluso, a veces el llamado «buen talante», suelen considerarse como signos de debilidad. A la hora de tomar una decisión, o de elaborar una estrategia política, no caben las emociones, la piedad o la compasión; el político debe ser frío y calculador, y no debe fiarse demasiado de la posibilidad del entendimiento basado en el respeto, en la confianza y en el diálogo. En política la clave es del poder, la fuerza y la agresión, es decir, lo que antes calificábamos como la cultura de la guerra y de la violencia.

Y ¡claro! ¡Así nos va!

Estoy convencido, por ejemplo, de que si los políticos que firman y promueven las guerras. o que favorecen y entran en el juegos de la fabricación y del comercio de las armas, dejaran en libertad sus sentimientos de ternura, y desde ahí, se hicieran conscientes del terrible dolor y de la destrucción que pueden llegar a generar sus decisiones políticas, posiblemente las pensarían antes de adoptarlas y, muy probablemente, renunciarían a ellas, e intentarían –por todos los medios disponibles– abrirles nuevos y originales caminos a la racionalidad, al entendimiento y al diálogo en la solución de los conflictos. Es en ese sentido en el que creo y afirmo que «La ternura puede llegar a ser un muro de contención contra la guerra y contra la violencia».

miércoles, 14 de julio de 2021

TRAVIS BIRDS Y SU APASIONANTE UNIVERSO MUSICAL Y POÉTICO

Uno de los principales motivos por los que desde hace ya años vengo amando la "canción de autor" en el sentido más amplio de ese género, y por los que me siento "enganchado" a ella, es por la capacidad que tiene para sorprenderme siempre, y cuando menos me lo espero. Sorprenderme sobre todo con el descubrimiento de nuevos creadores –compositores y cantantes– que con la belleza y la calidad de sus canciones logran emocionarme y poner "patas arriba" mis sentimientos más profundos.

Es cierto que, con el paso del tiempo, esa capacidad de sorpresa no se manifiesta ni todos los días, ni con la mayoría de los nuevos cantantes y las nuevas canciones con los que cotidianamente me voy encontrando. (A veces siento que los años vividos y apasionadamente disfrutados con la "canción de autor" me están haciendo ser cada vez más selectivo). 

Sin embargo, a pesar de ello, la sorpresa y la emoción me siguen atrapando, normalmente de forma inesperada.

Esto fue lo que me ocurrió el pasado viernes, día 9, en el concierto que dio Rozalén –a la que admiro profundamente– en el Palacio de los Deportes de Madrid. Antes de su actuación, y como ·"introito", salió al escenario la joven cantautora TRAVIS BIRDS y nos ofreció, acompañada de su grupo, varias de sus canciones.


TRAVIS BIRD


Yo personalmente nunca la había escuchado en directo y conocía poco el trabajo de esta joven cantautora madrileña. Recuerdo que la escuché por primera vez en un vídeo de Pascual Kantero "Muerdo" en el que Travis le acompañaba interpretando la canción "Lo bueno". Me gustó mucho su voz y su personalidad, pensé en perseguirla por internet para conocer su trabajo, pero momentáneamente ahí quedó todo. En aquel momento estaba totalmente inmerso en la escritura del libro de Pablo Neruda y no tenía tiempo para nada.

Cuando el pasado día 9, vi cantar a Travis Birds y pude escucharla, surgió ese momento mágico de sorpresa y de encantamiento del que antes hablaba. Me atrapó totalmente con sus canciones. Su voz, su música, sus historias, sus sensaciones y sentimientos cantados, y sobre todo su enorme personalidad me sorprendieron. Estaba disfrutando del descubrimiento inicial de una formidable y auténtica cantautora. Tanto, que aquella misma noche, ya en casa, me compré sus dos discos publicados y, desde entonces no he dejado de escucharlos.


"Año X" (2016)


"La costa de los mosquitos" (2021)

En realidad a mi me ha pasado con Travis algo muy similar a lo que ella cuenta en una de sus canciones: 

«Desde lejos divisaba 
la brujería que haces con la voz 
cuando el aire que te pasa 
va de tus pulmones a mi corazón».

Curiosamente el nombre artístico de esta cantante y compositora: Travis Birds. está tomado del protagonista –Robert De Niro– de la película Taxi Driver dirigida por Martin Scorsese; y es que, al igual que De Niro, Travis, en una situación personal muy crítica –yo diría que de búsqueda y aceptación de su propia identidad– decidió adentrarse en la exploración y en el conocimiento de su mundo y de su realidad interior y exterior, y muy en particular, en sus manifestaciones más complejas, oscuras y marginales. Proceso de exploración a partir del que, acompañada de una guitarra, se fue abriendo progresivamente a todo un luminoso universo expresivo –poético y musical– inspirado en sus observaciones y en sus sentimientos.

Ese universo expresivo logrado por Travis Birds es de una gran riqueza literaria en la que sabe conjugar un lenguaje claro, directo, y de gran realismo descriptivo, con la creación de bellísimas metáforas y de simbólicos juegos de palabra que –prácticamente en todas sus canciones– consiguen suscitar diferentes lecturas y proyectar sugerentes latidos esperanzadores que sobrevuelan, y te hacen sobrevolar libremente, por encima de la realidad, sea cual sea.


«Dentro de una calle
que estaba sin dirección
se sentó en el suelo y esperó
que se callara el aire.
Llevaba una libreta en la mano.
Durante meses había apuntado todos los días sin sol,
todos los trozos de tiempo que el tiempo desordenó.

Suda aunque ya no haga calor.
Algo le rozó en el pantalón
y a su rodilla le trepó para ver su gesto tan serio.

Te llueven los ojos
Y a mi el agua me causa pavor
pero el instinto me pidió que suba para contemplarte.

Tienes uno labios tan bonitos
que pueden causar dolor,
que podrían darle alas a un insecto como yo.

Y aquel tipo un poco fascinado
vio que la hormiga había cambiado,
que sin más se incorporó
y como si fuera un molino
de repente el vuelo alzó…»
("Alas")

Universo expresivo el creado por Travis en el que destacan también la muy bella calidad y riqueza musical que nos transmite en sus canciones; canciones en las que se funden sonoridades flamencas, el jazz, el folk, el rock, la música urbana y contemporánea e insospechadas melodías y sonoridades. Todo ello provocado con la complicidad de su magnífica banda. (Por cierto, me encantó la colaboración en el segundo disco de Sergi Renovell "El Ninho Trompeta”, músico y amigo por el que siento una gran admiración).


Sergi Renovell y Travis Birds

Por último, me parece muy importante destacar que de una forma global TRAVIS BIRDS a través de sus canciones formula una valiente y muy positiva poÉtica sobre los valores de la diversidad, la libertad y la igualdad; y lo hace sin mesianismos ni grandes proclamaciones morales, lo hace con el contagiante testimonio sencillo y elocuente de sus latidos, de sus vivencias y de sus convicciones.

¡Gracias Travis por estar ahí!... Es una suerte y un hermoso regalo para nuestra cultura –y en particular, para nuestra "canción de autor"– poder sentirte y escucharte cada día "cantando como quien respira"

sábado, 3 de julio de 2021

DAVID DEL RIO Y SU HOMENAJE MUSICAL A «VALDESOTO». NUEVO DISCO Y UN NUEVO DESBORDAMIENTO DE SENSIBILIDAD

"VALDESOTO" es un pueblo del concejo de Siero, en el Principado de Asturias.

Y a partir de ahora "VALDESOTO" es el título de un precioso disco que acaba de grabar el compositor y cantante DAVID DEL RÍO. Disco homenaje a su pueblo, a sus paisajes, a su gente, a sus recuerdos, y a sus propios latidos de vida,  hoy de agradecimiento. 

«Y los perros corrían libres saltaban la cerca de los días grises / ahora ya no me persiguen y empiezo a notar la cuanta atrás, / Todavía puedo oler las rosas, el resto lo escribo para no olvidar [...]. Los gatos de la marquesina se quedaron dormidos / ya nunca pasa el bus quu siempre perdíamos / ya nunca paa nada, tal vez he estado fuera demasiado tiempo. / No he venido a recoger mis cosas, volveré a casa hasta el final». (Todavía puedo oler a rosas).
.


Conozco y sigo la obra musical de DelRío desde hace ya tiempo, y recuerdo que la primera vez que le escuché cantar sentí una tremenda alegría y satisfacción porque de forma inesperada me encontré con un auténtico "cantautor" –para mi lo es indiscutiblemte– en el sentido pleno y más completo de ese "concepto".

En DelRio encontré sensibilidad, textos poéticos hermosos y cuajados de latidos –"con alma y realidad"–; muy buena música –¡esplénida!–; una voz y una interpretación con mucha personalidad; y, permitirme que lo destaque, una gran autenticidad manifestada de formar sencilla y muy honesta, o sea, lo que a mi me gusta calificar como la grandeza que se manifiesta y se deja sentir tras una espontánea humildad.

«Los silencios me hablan de ti / Escriben palabras... corazón, lealtad, pulmón, hogar. / Y si tengo sed me acerco allí / abierto siempre, el bar de David. / Mamá se acuerda de ti, dibuja palabras / esfuerzo, lar, pasión, ejemplo, paz, valor. / [...] Imposible recordar lo que no se puede olvidar». (Los Tilares. Para los abuelos Teresa y David)

Tras sus cinco primeros discos: "La radio salvó mi vida". Cuentas pendientes, grupo (2013), "La venganza de los Songwriters" (2015), "Al menos tenemos zapatos" (2015), "Los créditos" (2018), "Si después me llamas" (2019), DelRío nos ofrece un sexto en el que podemos disfrutar de nueve sugerentes y hermosas canciones escritas y compuestas por él que, por cierto, como él mismo confiesa, «aún sigue siendo el chico que veía las estrellas distantes y las guarda bajo llave». 

Sinceramente, es un verdadero placer, reseñar y recomendar discos como este "VALDESOTO" de DAVID DEL RÍO; y una gran suerte escucharlo y al final de la audición percibir y sentir su invitación: «Si ves la luz del portal, se pasas por delante, / no dudes en entrar te guardo un detalle / por si no nos vemos antes». (La luz del portal).

Esta mañana recibí la información sobre el estado actual de mi Blog "CANTEMOS COMO QUIEN RESPIRA" y una vez más me ha sorprendió ...